miércoles, 5 de junio de 2013

Secuestro en Colombia

Sergio Muñiz Brioso (asturiano, 28 años) es secuestrado en Tacueyó, en el termino de Toribio (departamento del Cauca, Colombia) por una banda conocida como Rastrojos o Mercenarios,  un grupo narcoparamilitar surgido tras la desmovilización de las AUC que opera en la zona con la connivencia de las FARC.
Muñiz llego a Cali procedente de Madrid el día anterior y le recogieron en el aeropuerto dos colombianos. Era la segunda vez en el año que Muñiz viajaba a Colombia.
Al día siguiente de su llegadas se desplazó con unos colombianos a Santander de Quilichao para una cita y se cree que desde allí se desplazó a la zona rural de Tacueyó donde quedo secuestrado. al parecer se pidió un rescate de 1 millón de euros, luego reducido a 200.000 euros. Muñiz telefoneó a su familia a finales de mes contando su situación.
La policía sospecha de algún negocio ilegal vinculado con las drogas en este secuestro.
El 22 de agosto, unos vecinos del barrio El Mirador, de Corinto, escucharon unos disparos y avisaron a las autoridades que encontraron el cuerpo de Muñiz con tres disparos, los ojos vendados y a su lado el pasaporte.
Un vendedor ambulante de café fue la última persona en hablar con Sergio Muñiz en Santander de Quilichao. Momentos después fue raptado y conducido a la zona de Tacueyó, ya en la cordillera, una zona controlada por las FARC.
La banda de «Los Rastrojos», a cuyos miembros se les atribuye el secuestro del ovetense, es uno de los cuatro grupos paramilitares de narcotraficantes más poderosos de Colombia. En la actualidad, el principal objetivo de «Los Rastrojos» pasaría por tomar el control de los cultivos de coca cada vez en más territorios. La retención de personas no es una acción nueva para ellos, sino de lo más habitual, y sus secuestros no suelen durar más de dos o tres meses. Si no obtienen lo que quieren, matan al rehén.

El 11 de junio la Policía Local detuvo a tres personas (dos leoneses residentes en Vigo y un lituano con antecedentes por homicidio doloso) por retener y agredir a dos ciudadanos (un español y un colombiano) en Colloto (Asturias). Uno de ellos logró escapar y contó a la policía que los «matones» los buscaban a él y a su colega por el secuestro de una tercera persona, su amigo Sergio Muñiz, en Colombia. Fuentes policiales indicaron que la banda criminal que retenía al ovetense envió a estas tres personas a la ciudad a «sus compinches» como medida de presión para que pagasen el rescate.


Autoría: ¿delincuentes comunes?

Duración: 78 días